Hace tan solo unos días, el profesor Xoán González nos invitó a ver un video en el que observábamos con estupor, diría que la mayoría de la clase, una casa en la que una mujer impartía clases a sus propios hijos de las más diversas materias, lengua española, inglés, rumano, canto, piano… y un sinfín de materias a cada cual más ilustrada.
La propia madre defendía este tipo de educación por contraposición a la escolar pública habitual argumentando que esta última es “poco eficiente”, “nos hemos enquistado en una estructura decimonónica que no hace frente a las necesidades educativas de los niños de hoy en día” afirmaba. Sin embargo, a mí realmente me genera una cierta sensación de inquietud que este tipo de “movimientos” cuasi norteamericanos (como afirma mi compañero Juan Carlos en su blog) procedentes de EE.UU se defiendan alegando prácticamente que “lo mío es más moderno y por lo tanto, mejor”, me recuerda un poco, perdonad la disquisición, a cuando en el trabajo debatimos una compañera de etnia gitana y yo acerca del cristianismo católico (payos y gitanos mayores) vs evangelista (gitanos jóvenes), teniendo presente que el evangelismo es una rama protestante procedente de Norteamérica. Ella afirma que “la suya” (su religión) es mucho mas moderna (y por ende, mejor), menos aburrida, más visual, más alegre, en definitiva que va más acorde a los nuevos tiempos…
Decía que me viene a colación, porque desde mi punto de vista, al igual
que Halloween, sectas protestantes y ahora el Homeschooling están tratando de
permear en la cultura históricamente europea bajo un pretexto que hila fino a
favor de muchos conceptos mercantiles, “recursos humanos”, “educación por competencias
(LOMLOE)”, “gestión de las emociones”, allá donde vayas siempre encontrarás “modernidad” y “progreso”,
conceptos que trenzan con ideas procedentes de la Ilustración y que se colocan
bajo la bandera de una suerte de “nuevo Renacimiento”, más puro, mas sencillo,
para la mayoría (en realidad, MASA) y por supuesto, ANTI-ideológicos claro… Cuando en
realidad, todo es sencillamente una falsedad. Movimientos como el Homeschooling,
desde mi punto de vista, no son sino “embajadores de parte” de una cultura
dominante que trata de dar la vuelta al tablero para que juguemos según sus
reglas, pues no, sencilla y llanamente No. Revelar las contradicciones de
nuestro propio sistema, con todas sus carencias, no es lo mismo que adoptar
otros sistemas guiados únicamente por el factor novedad. Le diría, con
educación, “lo siento, pero no quiero el folleto” (y cierro la puerta)
Hola Iván. Gracias por la cita :).. estoy de acuerdo contigo, creo que vivimos un tiempo de anglobalización, como dice el filósofo italiano Diego Fusaro. Muchas de las medidas que pasan por innovadoras y transgresoras en realidad son reaccionarias. El Homeschooling se defiende en aras a la libertad del individuo, pero en realidad es un retroceso. Es una vuelta al periodo anterior al siglo XVIII-XIX, a la figura del preceptor. Se trataba de un tipo de instrucción propia de familias burguesas adineradas o de extracción nobiliaria. Creo que difícilmente un país con el PIB per capita de España puede garantizar un homeschooling equitativo. Muy buena entrada
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